Me he cruzado por la calle con un señor barrigón...

Tal que esta mañana al alba hemos tenido que ir corre que te corre a comprar parte de los Reyes al centro comercial de Alcorcón. Estamos en época de consumismo así que a por las últimas compras de la Navidad y el capricho. Estaba todo petado de gente hasta en los probadores. Los españoles dejamos para el último día la ilusión de los niños. Una verguenza. El único provecho es que mientras miroteaba por la tienda se me han enganchado al jersey una linterna de leds y dinamo, un buff de esos pal cuello y unas gafas fashion.
Mañana también al alba tol mundo por la calle probando los regalos. Turno de esquivar coches radicontrol, aviones del tipo sacaojos y alegres mozalbetes a dos descontroladas ruedas. Y lo peor todos a Peñalara a comerse la nieve como si nunca la hubieran visto, a pisotear el desague de la laguna y a propagar y contagiar los virus de la urbe a las especies autóctonas que cada vez son menos numerosas tanto en número como en población.